¿Y Rodrigo Abdala?
¿Alguien sabe dónde está el dos veces súper delegado de Bienestar, Rodrigo Abdala?¿Sabemos si el morenista todavía sigue interesado en la Presidencia Municipal de Puebla? ¿ Alguien nos puede explicar el porqué teniendo todo para figurar hace lo posible por mantener un bajo perfil?
La situación del ‘súper delegado’ es digna de una reflexión política.
Ahí le va.
Rodrigo, pese a su perfil fifí, es miembro fundador de Morena, lo que significa que el poblano de origen libanés fue ‘chairo’ y ayudó a construir el partido más poderoso del país desde cero. Derivado de este esfuerzo, Abdala fue nombrado ‘súper delegado’ por el mismísimo López Obrador. (Dato no menor)
En 2024, -cuando hasta Julio Huerta quiso ser Gobernador- Rodrigo figuró dentro de todas las encuestas para la alcaldía y la gubernatura. Aquí lo relevante fue que lo hizo sin la necesidad de tapizar el Estado de espectaculares.
En el momento de definición de candidaturas a Rodrigo le ofrecieron de todo, masajes gratis, cafés ilimitados, pluris en el Congreso y la Cámara de Diputados, secretarías de estado, direcciones e incluso ofertas de otros partidos. De manera inexplicable Rodrigo no aceptó ninguna.
Cuando todos los daban por muerto, la mismísima Presidenta Claudia Sheinbaum volvió a nombrar a Rodrigo ‘Súper Delegado’. Decisión que incomodó y sorprendió a más de uno.
Por si faltara algo más -dicen- que Abdala tiene el visto bueno del Gobernador Alejandro Armenta para contender por la alcaldía de Puebla. Un candado que parecía imposible de desbloquear.
Pese a todo esto, Rodrigo Abdala insiste en no figurar. Al morenista no le gusta el “””exceso””” de protagonismo y prefiere un perfil bajo. Si no me cree, eche un vistazo a sus redes y vea la cercanía del súper delegado con la Presidenta de México este fin de semana, la cual NUNCA presumió en redes, ni capitalizó mediáticamente.
Inexplicablemente Rodrigo Abdala se niega a brillar en la cúpula política. El morenista quiere pero no quiere. Se asoma, pero después se agacha. Erróneamente piensa que su personalidad debe ser la línea que predomine en su perfil público.
Rodrigo tiene el puesto, la vigencia, el posicionamiento, la cercanía -con Sheinbaum- y el control de los programas federales. ¿Algo más?
-Sí, al ‘súper delegado’ le falta tantito carácter.
El Remate.
El poder no se gana, se arrebata.