Armenta abrirá la cloaca del transporte público 

Nos gusta, nos llena y nos ilusiona el morbo que este tema genera a nivel social.

Sabemos que el transporte público en Puebla, apesta. Sabemos que la calidad del servicio es terrible. Sabemos que sólo de subirse a una combi, los usuarios se deprimen. 

También sabemos que los choferes no están capacitados y que hay jóvenes de 16 años manejando unidades con más de 40 pasajeros abordo. Sabemos que los conductores no tienen un sueldo fijo, ni prestaciones de ley, mucho menos una empresa que los respalde.

Sabemos que las concesiones se dan por favores, moches y, en el peor de los casos, por compadrazgos. Sabemos que ex funcionarios públicos tienen concesiones gracias a su influencia pública.

Sabemos eso y más de la corrupción que impera en el transporte público poblano.

Lo que no sabemos es quién lo permitió en su momento, quién recibió el moche, quién se benefició del servicio público y quiénes siguen disfrutando de la corrupción entre concesionarios.

Estaremos atentos al destape de una cloaca que es muy, muy profunda.